Las 3 brujas

Hace muchos años, los habitantes de los pueblos ubicados alrededor del Tepozteco, en Morelos, sufrían por la presencia de tres brujas, las cuales se aparecían en lo alto del cerro como bolas de fuego que, extrañamente, no quemaban la vegetación. Se alimentaban de bebés, por lo que los curanderos le dijeron a la gente que colocaran ajo en las puertas y pusieran cruces blancas para que no pudieran entrar a robarse a los pequeños. Con eso lograron que fallecieran dos.

Quedó la más malvada, la más fuerte, y los curanderos se unieron para acabar con ella, pero los fue matando uno a uno hasta que sólo quedó la más valiente. Ella se enfrentó a la bruja en el Tepozteco, pero fue vencida por la hechicera quien, a pesar de haber ganado la batalla, quedó muy débil, por lo que decidió bajar para recuperar fuerzas. Pero las pobladores se armaron de valor, agarraron machetes y palos, y rezando se fueron acercando a la hechicera para matarla.

Subió de nuevo al Tepozteco y el monte aprovechó que la malvada casi desfallecía para tragársela. Por eso en el cerro hay una piedra enorme con cara de bruja.