Si no se adoptan medidas urgentes para reducir la vulnerabilidad, proporcionar acceso a servicios básicos y aumentar la resiliencia, las consecuencias del cambio climático podrían sumir en la pobreza a otros 100 millones de personas para 2030.
Se debe de considerar que los efectos de los desastres naturales graves equivalen a pérdidas en el consumo mundial, del orden de los 520 mil millones de dólares anuales, y empujan a la pobreza a 26 millones de personas cada año. Con el tiempo, el cambio climático provocará desplazamientos considerables de asentamientos humanos, por lo que la planificación del desarrollo tendrá que tomar en cuenta esos movimientos.