Estos son los 5 momentos fundamentales que impulsaron a Lili Elbe a seguir su identidad y ser la primera mujer transexual.
Su adolescencia:
Su apariencia física en la etapa de desarrollo definitivo mostró una complexión bastante delgada, su rostro afilado con rasgos femeninos, sus piernas estilizadas y en general su cuerpo delicado eran indicadores de cuerpo femenino. Después conocidos como “intersexuales” (características orgánicas, genéticas y fenotípicas de varón y de mujer en grado variable).
Se dice que los rasgos de Einar eran incluso atractivos para los hombres y tan confundibles con los de una mujer joven, que antes de cualquier cambio operatorio o en su vestimenta, recibió propuesta de citas por parte de un hombre que creyó Einar era una mujer.