El uso de sus retratos como evidencia
La primera gran evidencia que los investigadores encontraron fue la aversión de da Vinci a los autorretratos. Si bien, puede ser que Da Vinci no tenga muchos retratos “confirmados”, los investigadores seleccionaron una “progresión de retratos” que probablemente sean Da Vinci, desde el momento en que fue aprendiz de artista hasta su vejez. Estos retratos fueron comparados y medidos entre sí para encontrar el nivel de alineamiento promedio de los ojos plasmados en los lienzos.